Ácido Fólico
Que es
El ácido fólico, folacina o ácido pteroil-L-glutámico (llamado en su forma aniónica folato), conocida también como vitamina B9, es una vitamina hidrosoluble del complejo de vitaminas B, es necesario para la formación de proteínas estructurales y hemoglobina
Los términos "fólico" y "folato" derivan su nombre de la palabra latina folium, que significa hoja de árbol.
La actividad coenzimática del ácido fólico es el THF o tetrahidrofolato.
Utilización y orígenes usuales
El ácido fólico es efectivo y utilizado en el tratamiento de algunos tipos de anemia. Se obtiene de las vísceras de animales, verduras de hoja verde, legumbres, levadura de cerveza y en frutos secos y granos enteros, como las almendras. El ácido fólico se pierde en los alimentos conservados a temperatura ambiente y durante la cocción.
Presencia en el cuerpo
A diferencia de otras vitaminas hidrosolubles, el ácido fólico se almacena en el hígado y no es necesario ingerirlo diariamente.
Las causas de su carencia son la mala alimentación y un déficit de hidratación del folato genético que es asintomático hasta que la mujer se queda embarazada.
La importancia del ácido fólico en el organismo
Es importante que la mujer, antes del embarazo, mantenga unos niveles óptimos de ácido fólico en el organismo, esta vitamina puede prevenir deformaciones en la placenta que podrían conducir al aborto, defectos en el cerebro (anencefalia) y la columna vertebral (espina bífida) del bebé por mal cierre del tubo neural en los extremos cefálico y caudal respectivamente. La espina bífida es un defecto en la columna que puede producir la parálisis de la parte inferior del cuerpo, la falta de control del intestino y la vejiga, y serias dificultades en el aprendizaje. Si el feto sufre déficit de ácido fólico durante la gestación también puede padecer anemia megaloblástica, ser prematuro o presentar bajo peso al nacer. La madre puede sufrir eclampsia, un proceso que ocasiona hipertensión y albuminuria. El ácido fólico también ayuda a mantener una matriz sana.
Historia
Una observación realizada por la investigadora Lucy Wills en 1931 guio la identificación del folato como un nutriente requerido para prevenir la anemia durante el embarazo. Wills demostró que la anemia podía ser tratada con levadura de cerveza. El folato fue identificado como una sustancia contenida en la levadura de cerveza durante 1930 y fue extraída de la espinaca después en 1941. Fue sintetizada por primera vez en 1946 por Yellapragada Subbarao.
Folato en los alimentos
Las legumbres (garbanzos, lentejas, etc.) y los vegetales de hoja verde como la espinaca, escarola, guisantes, alubias secas, cereales fortificados, frutos secos, semillas de girasol suponen altos aportes ácido fólico. En las plantas se presenta como ác. fólico al que se le unen siete ác. glutámicos y tras su consumo, en el intestino se hidroliza por acción de la folil poliglutamato hidrolasa, a su forma monoglutámica, o ácido fólico, forma en la que si puede pasar a la sangre. Algunos cereales para el desayuno son enriquecidos con ácido fólico en distintos porcentajes de la CDR. La carne es pobre en ácido fólico, pero sí se obtienen cantidades significativas en el hígado de algunos animales, como la ternera, y también en el pescado azul. El ácido fólico debe usarse durante el primer trimestre del embarazo.
Papel biológico
El ácido fólico es necesario para la producción y mantenimiento de nuevas células como como en la infancia y embarazo. El folato es necesario para la replicación del ADN. Por esto, la deficiencia de folato dificulta la síntesis y división celular, afectando principalmente la médula ósea. Debido a que la síntesis de ARN y proteínas no se obstaculiza completamente, se forman células sanguíneas largas o sin forma regular llamadas megaloblastos, originando anemia megaloblástica. Tanto niños como adultos necesitan ácido fólico para producir células sanguíneas normales y prevenir la anemia.
Dosis diaria recomendada
1998 CDR de Ácido Fólico
Hombres
19 o más años: 400 µg
Mujeres
19 o más años: 400 µg
Embarazo: 600 µg
Lactantes: 500 µg
1 µg de folato en los alimentos= 0.6 µg de ácido fólico de suplementos y alimentos fortificados.
El estudio NHANES III, 1988 -91 (The National Health and Nutrition Examination Survey) y la Investigación Continua de Ingesta de Alimentos por Individuos (CSFII 1994-96), indicaron que la mayoría de adultos no consumen la cantidad adecuada de ácido fólico. Sin embargo; el programa de fortificación en Estados Unidos ha incrementado el contenido de ácido fólico comúnmente consumido en alimentos como cereales y granos y como resultado de esto, la mayoría de adultos ahora ingieren cantidades recomendadas de folato diario.
El riesgo de toxicidad por ácido fólico es bastante bajo. El Instituto estadounidense de medicina ha establecido una ingesta máxima tolerable de 1 mg para adultos (hombres y mujeres) y un máximo de 800 µg para mujeres embarazadas y lactantes menores de 18 meses de edad. Los suplementos de ácido fólico no deberían exceder el máximo tolerable para prevenir la deficiencia enmascarada de vitamina B12. Las investigaciones sugieren que niveles altos de ácido fólico pueden interferir con algunos tratamientos contra la malaria.
Deficiencia de ácido fólico
Una deficiencia de folato puede ocurrir cuando las necesidades del nutriente están aumentadas, cuando la ingesta diaria de folato es inadecuada y cuando el cuerpo excreta más folato de lo usual (pérdidas). Algunas investigaciones indican que la exposición a rayos ultravioleta incluyendo las cámaras de bronceado, puede conducir a deficiencia de ácido fólico. La evolución del color de la piel en humanos es particularmente controlada por la necesidad de tener un color oscuro en la piel para proteger el ácido fólico de los rayos ultravioleta.
La deficiencia de ácido fólico se manifiesta con diarreas, pérdida del apetito, pérdida de peso. Signos adicionales son debilidad, lengua dolorida, dolor de cabeza, taquicardia, irritabilidad y desórdenes de conducta. Las mujeres con deficiencia de ácido fólico que están embarazadas, suelen tener niños de bajo peso al nacer, prematuros y con defectos del tubo neural. En adultos, la anemia (macrocítica, megaloblástica) es un signo avanzado de deficiencia de folato. En niños, la deficiencia de ácido fólico puede retardar el crecimiento.
Embarazo
El ácido fólico es importante en las mujeres embarazadas. La ingesta adecuada del mismo durante el periodo anterior y después de la concepción, ayuda a proteger al bebé contra un número de malformaciones congénitas incluyendo defectos del tubo neural. Los defectos del tubo neural resultan en una malformación de la espina (espina bífida), cráneo y cerebro (anencefalia). El riesgo de los defectos del tubo neural es significativamente reducido cuando el suplemento de ácido fólico es utilizado como consumo adicional a una dieta saludable antes y durante el primer mes seguido de la concepción. La ingestión de 400 µg diarios de ácido fólico sintético de alimentos fortificados o suplementos ha sido sugerida para evitar estos defectos. La recomendación diaria o requerimientos diarios adecuados del folato en mujeres embarazadas es de 600 – 800 microgramos, casi el doble recomendado que para mujeres no embarazadas-
Aunque no se conoce un nivel tóxico para el ácido fólico, sí que hay estudios que asocian el exceso de ácido fólico en el último trimestre del embarazo con que el niño por nacer desarrolle asma. Por ello la recomendación es tomar un suplemento alto en ácido fólico antes de quedar embarazada y en el primer trimestre, que es cuando su carencia sería más grave, sustituyéndolo en el segundo y tercer trimestre por un suplemento más moderado.
Suplemento de ácido fólico y deficiencia enmascarada de vitamina B12
Es conocida la interacción entre vitamina B12 y ácido fólico. El aporte de ácido fólico puede corregir la anemia por deficiencia de vitamina B12, pero ácido fólico no corrige los cambios en el sistema nervioso causados por la falta de vitamina B12. En teoría se podría dar un daño nervioso permanente si la deficiencia de vitamina B12 no se trata. Por ello, la suplementación de ácido fólico no pueden superar los 1000 microgramos por día, pues enmascara los indicadores de la deficiencia de Vit. B12.
Depresión
Algunas evidencias relacionan bajos niveles de ácido fólico con depresión. Existen algunas evidencias de ensayos controlados que sugieren que usar ácido fólico en adición a medicamentos antidepresivos puede tener beneficios.
Memoria y agilidad mental
En un estudio realizado durante tres años en casi mil personas mayores de 50 años, sobre memoria a corto plazo, agilidad mental y fluidez verbal; se encontró mejoría en todas aquellas personas que ingerían 800 µg de ácido fólico a diario y no así en aquellos que tomaron solo placebo. El estudio fue reportado en The Lancet el 19 de enero del 2007.