Hacia una buena salud ocular

 Como todas las demás partes del cuerpo, los ojos necesitan una nutrición adecuada. El cuidado de los ojos implica hacer una dieta sana que contenga una cantidad suficiente de vitaminas y minerales, además de no esforzarlos demasiado al trabajar ni realizar actividades con mala iluminación.

 

Para promover la buena visión, usted debe asegurarse de que su dieta contenga una cantidad adecuada de vitaminas B, de vitaminas A, C y E, y de los minerales selenio y cinc. Las frutas y los vegetales frescos son buenas fuentes de estas vitaminas y minerales; incluya muchos en su dieta, especialmente alimentos de color amarillo y amarillo anaranjado, como zanahoria, batata y melón cantaloupe. Una dieta bien balanceada y que contenga abundantes frutas y vegetales frescos contribuye a la salud de los ojos.

Cuando estamos en el exterior, la exposición a la luz solar puede ser dañina. La recomendación es que las personas que pasan mucho tiempo al sol lleven gafas de sol con protección frente a los rayos ultravioleta (UV) que bloqueen ambos tipos de rayos (UV-A y UV-B). La radiación UV-A tiene una longitud de onda de 320400 nanónnetros y es capaz de atravesar la capa de ozono de la tierra. La radiación UV-B tiene una longitud de onda de 280320 nanómetros. La capa de ozono absorbe la mayor parte de esta radiación, pero una pequeña cantidad puede traspasarla; es la que provoca cataratas, pterigión (lesiones benignas a los lados de la córnea) y cáncer de piel. Esto es especialmente así en el caso de los niños; sus gafas deben ser de la misma o superior calidad que las de los adultos, no modelos de juguete. Una buena opción son las gafas de policarbonato, que son ligeras, resistentes a los golpes y sólidas desde el punto de vista óptico.

Extractos herbales

• Es provechoso tomar por vía oral las hierbas Myrica, cayena (capsicum) y hojas de frambuesa.
• El extracto de arándano mejora tanto la visión normal como la visión nocturna.

• Incluya en su dieta los siguientes alimentos: bróculi, col cruda, zanahoria, coliflor, vegetales verdes, squash, semillas de sunflower y berros.
• Tome jugo de zanahoria fresca. Este jugo ayuda a prevenir o a aliviar algunos de los problemas de los ojos.
• Elimine de su dieta el azúcar y la harina blanca.
• Si usted utiliza gafas, hágales colocar a los cristales — que deben ser claros — un filtro contra los rayos ultravioleta. Estos filtros protegen a los ojos contra estos nocivos rayos. No utilice gafas oscuras para este propósito, en especial de manera permanente. Los anteojos oscuros impiden que los ojos reciban la luz que necesitan. El funcionamiento de la glándula pineal, que desempeña un importante papel en la regulación del metabolismo, el comportamiento y las funciones fisiológicas, depende en gran medida de la luz del sol.
• Nunca se aplique en las pestañas ni en las cejas tinturas para el cabello que contengan alquitrán de hulla. Hacerlo puede causar lesiones e, incluso, ceguera. Aun cuando vender tinturas con alquitrán de huella es legal, venderlas para ser utilizadas en las cejas y en las pestañas no lo es.

 

Hay tres tipos de especialistas de los ojos:
1. Oftalmólogos. Son médicos especializados en los ojos. Ellos diagnostican y tratan las enfermedades oculares, operan los ojos, hacen exámenes oculares y prescriben lentes correctivos.
2. Optómetras. No son médicos, pero en algunos estados del país tienen licencia para hacer exámenes oculares y tratar problemas que no impliquen cirugía. Pueden formular lentes correctivos y en algunos estados también se les permite prescribir medicamentos.
3. Ópticos. Los ópticos formulan anteojos y lentes de contacto.

• Como el pigmento de la retina que absorbe la luz se compone de vitamina A y proteínas que se gastan continuamente al formarse las imágenes, es vital tomar cantidades adecuadas de estos nutrientes para que los ojos funcionen adecuadamente.
• La combinación de nicotina, azúcar y cafeína puede afectar temporalmente a la visión.
• El oftalmólogo y autor Gary Price Todd, M.D., dice que consumir margarina y shortening vegetal es nocivo para las personas que sufren de algunos trastornos oculares. Como sustitutivos sirven la mantequilla y los aceites vegetales. A las personas que se van a someter a cirugía ocular él les sugiere que tomen algún suplemento multivitamínico y mineral la noche anterior a la operación, de preferencia una fórmula que incluya 10.000 unidades internacionales de vitamina A, 1.000 miligramos de vitamina C y 1.200 unidades internacionales de vitamina E. También recomienda utilizar estos nutrientes de manera permanente, además de 2 miligramos de cobre y 20 miligramos de cinc al día, después de la cirugía.
  Advertencia: Si se producen sangrados o si usted tiene tendencia a sangrar, no debe tomar vitamina E menos de dos días antes de hacerse una operación quirúrgica. Puede volver a tomarla después de la cirugía. Esta es una situación temporal. La dosis dada no es la recomendación del autor.
• l sea mussel es una fuente de proteína que ayuda al funcionamiento del tejido ocular y a la secreción de fluidos oculares.
• Al parecer, el Zinc ayuda a reducir la pérdida de visión porque interviene en el metabolismo de varias enzimas del complejo coriorretiniano (el recubrimiento vascular del ojo). Sin embargo, nunca se debe tomar más de 100 miligramos al día.
• Según un informe publicado en la revista médica Ocular Diagnosis and Therapy, los agentes antiinfecciosos, el diazepam (Valium), el haloperidol (Haldol), algunos antidepresivos, la quinina y las sulfas pueden precipitar el desarrollo de algunas anomalías oculares.
• Las personas que todos los días trabajan ante un computador tienen alto riesgo de presentar fatiga ocular, dolor de cabeza, visión borrosa, sequedad y/o irritación de los ojos, sensibilidad a la luz, visión doble e imagen consecutiva.

Las personas que utilizan lentes de contacto deben cuidar mucho sus ojos por el riesgo que conllevan de lesión e infección. Dos estudios recientes han demostrado que utilizar lentes de contacto durante más de veinticuatro horas seguidas puede producir queratitis ulcerativa, una afección ocular que produce desgaste de las células de la córnea, lo cual conduce a infección y cicatrización. Cuando este problema no se trata de la manera apropiada, se puede presentar ceguera. De acuerdo con la revista médica The New England Journal of Medicine, las personas que utilizan lentes de contacto de uso prolongado tienen una probabilidad entre diez y quince veces mayor de desarrollar queratitis ulcerativa que las demás personas. Cuando los lentes de contacto corrientes se dejan puestos durante la noche, el riesgo asciende al mismo nivel.

Algunos lentes de contacto sí están diseñados para su uso nocturno. Así, las Oprifocan A (JSZ Orthokeratology Contact Lenses, de Overnight Wear) son unos lentes rígidos, permeables a los gases que se emplean temporalmente para corregir la miopía. Se llevan al dormir y funcionan aplicando una ligera presión sobre el centro de la córnea y haciendo que ésta se aplane. Al quitárselas, la córnea aplanada redirige la luz hacia la retina a un ángulo que permite compensar la miopía. La córnea vuelve lentamente a su forma normal a lo largo del día, por lo que hay que ponerse los lentes todas las noches para que la visión corregida se mantenga.
Las anomalías en uno o más de los seis músculos que controlan el movimiento de los ojos, o la falta de coordinación entre esos músculos, puede dar origen a estrabismo convergente o estrabismo divergente. Para mejorar el funcionamiento de esos músculos, es posible ejercitarlos y relajarlos. De igual manera, los músculos internos se pueden ejercitar a fin de mejorar la capacidad de enfocar que tienen los ojos, tanto de cerca como de lejos.